Hablar de Atlas no sólo es referirse a uno de los equipos de más abolengo e importancia en el fútbol mexicano, es conocer una parte significativa de la identidad de Guadalajara, de las pasiones y valores de su gente, el impacto de un deporte europeo que adquirió un sabor único al mezclarse con la festividad e intensidad latinoamericana. Innumerables historias de vida que abarcan a múltiples generaciones, estratos sociales e idiosincrasias, todos unidos por la magia creada al rodar el balón.
HISTORIA
los orígenes de atlas fc
El mejor punto para iniciar a narrar la historia de Atlas es el México de la era de la Revolución. La ciudad de Guadalajara se convirtió en un sitio especialmente atractivo para los europeos recién llegados por su abundancia de recursos y entorno pacífico.
Una de tantas familias que se asentó en la Perla de Occidente fue la de Manuel Cortina, procedente de Madrid y padre de dos hijos, el menor de ellos era Juan José, quien estaría destinado a cambiar para siempre el panorama cultural de la localidad. Juan José Cortina pasó la mayor parte de su infancia estudiando en Inglaterra, donde su pasatiempo favorito era practicar un deporte, de reciente creación en esos días, que lo cautivó por completo: el fútbol.
Al morir su padre se vio obligado a tomar el control de las propiedades familiares en Guadalajara. La semilla emprendedora ya crecía en su interior al momento de regresar al país y enterarse de que varios jóvenes de familias como los Fernández del Valle y los Orendain también habían regresado de colegios ingleses donde practicaron este nuevo deporte, decidió reunirlos en un café del centro de la ciudad para desarrollar su providencial plan: la fundación de un club de fútbol con la disciplina, nivel y organización que había experimentado en sus viajes a Inglaterra.
Las conversaciones generaron un revuelo tal en todos los asistentes que se pactó la creación del club y Cortina consolidó así su genial propuesta que trascendería a su tiempo y sus expectativas iniciales. El 15 de agosto de 1916 quedaría fundado de forma oficial Atlas. Como el mismo Juan José “Lico” Cortina relató: “A mí me tocó bautizarlo con el nombre de Atlas, pues nuestro entusiasmo era tal que ya nos creíamos el sostén del mundo”, al hacer referencia al titán de la mitología griega.
símbolos rojinegros
Se decidió crear un escudo que a la postre se convertiría en uno de los más icónicos y elegantes de toda la historia del fútbol mexicano. Cortina acudió con un amigo cercano para que diseñara el símbolo. “Fui con mi amigo y conocido artista don Carlos Stahl y le di una idea de lo que quería. Ni corto ni perezoso en menos de veinte minutos me presentó el escudo de la codiciada A blanca, con su fondo rojinegro”, compartió “Lico” Cortina en su crónica de 1936.
La identidad del equipo se concretó con la creación de un uniforme, idea motivada por el desacuerdo de los primeros atlistas con la informalidad de los jugadores locales de aquella época, quienes se limitaban a jugar con su ropa de uso diario. Fueron los hermanos Ernesto, Tomás y Rafael Orendain quienes propusieron usar los colores rojo y negro, que simbolizaban al mártir san Lorenzo, patrono del colegio Ampleforth de Inglaterra, donde estudiaron.
De forma casi inmediata se empezó a competir en contra de los otros equipos de la ciudad, como el Águila, Colón o Morelos, pero rápidamente se forjó una rivalidad que terminaría definiendo de forma significativa la identidad de Atlas: los juegos en contra del Guadalajara.El primer clásico tapatío del que se tiene registro, y que lo hace el más antiguo en el país, ocurrió en 1917. Fiel a su costumbre de imponer condiciones en los partidos más importantes, Atlas apabulló 18-0 al Guadalajara y dejó colocados los cimientos de una rivalidad que se extiende hasta la actualidad.
el paradero
Ubicado en el camino entre los municipios de Guadalajara y Tlaquepaque, el Parque Paradero fue sede de los entrenamientos de Atlas desde 1918 hasta 1980. Este mítico campo fue testigo de los primeros títulos de la era amateur. En aquellos días, los Rojinegros se convirtieron en potencia absoluta de los torneos denominados de Primera y Segunda Fuerza.
La década de los veinte trajo importantes eventos para Atlas, que ya se posicionaba como insuperable protagonista del balompié en Jalisco. En 1921 se jugó el Torneo Centenario en la Ciudad de México ante el equipo Luz y Fuerza, el primer torneo que Atlas jugó fuera del estado de Jalisco. Entre 1921 y 1929 se consiguieron cinco campeonatos de Segunda Fuerza, siendo los Rojinegros un rival implacable.
La profesionalización
Al crecer el interés por la práctica del fútbol en Jalisco, los jugadores se sentían cada vez más limitados por la organización de pequeños campeonatos locales, hecho que coincidió con que la liga de la Ciudad de México buscaba la incorporación de más equipos y, por su parte, los futbolistas buscaban mejores salarios y condiciones. Al ser el principal protagonista en Jalisco, Atlas no dudó en dar el salto hacia horizontes más amplios y unirse a la primera Liga nacional de fútbol profesional que se fundó en 1943.
La década de los cuarenta demostraría el porqué Atlas estaba destinado a trasladar su protagonismo local hacia el plano nacional. Con una brillante generación de jugadores que incluía a Felipe Zetter, Jesús “la Chita” Aldrete, Rodrigo Solano, entre otros ídolos rojinegros, el primer título de la era profesional llegaría con la Copa México de 1946, en la cual, con marcador de 5-4, los Rojinegros salieron avantes en contra de Atlante, colocando el primer aviso de que este equipo daría mucho de qué hablar con más triunfos y copas. Ese mismo año se ganaría el Campeón de Campeones.
En 1950 llegaron los primeros roces internacionales y destaca un vibrante duelo ante el entonces subcampeón argentino River Plate que los Rojinegros ganaron por 3-2. La victoria dejó tan impresionados a sus rivales que el mismo presidente de Argentina, Juan Domingo Perón, les entregó una réplica del sable del libertador San Martín, reconociendo su talento.
Una tarde de gloria: el primer título de Liga
La confianza del equipo dirigido por Eduardo “Ché” Valdatti subía a la par de su nivel y para 1950 ganaron su segunda Copa México y Campeón de Campeones, confirmando que eran, por mucho, el mejor equipo de aquellos días.
La temporada 1950-1951 coronaría el buen momento que los Rojinegros atravesaban. Atlas llegó como amplio favorito para llevarse la Liga ese año y, semana a semana, fue haciendo válidos los pronósticos al mantenerse firme en la primera posición aunque no sería una lucha sencilla debido a que el Club León se acercaba peligrosamente hasta la penúltima fecha, cuando los Rojinegros tenían la oportunidad de sellar el primer lugar si derrotaban ni más ni menos que al acérrimo rival: el Guadalajara.
La expectativa por este partido contagió a toda la ciudad de Guadalajara que generó un lleno total en el Parque Felipe Martínez Sandoval, presagiando una tarde que entraría directamente a los momentos más gloriosos de la historia atlista.
Fue el 22 de abril de 1951 el día en que los corazones rojinegros latieron al unísono para apoyar a los del Paradero en una fecha trascendental.
El partido inició tenso, con un Guadalajara que no cedía terreno a los embates de Atlas, pero a los diez minutos de la segunda mitad, una falta dentro del área a favor de los “Académicos” le dio la oportunidad a Edwin Cubero de transformarse en leyenda. El partido se decidió con un tiro de castigo desde el manchón penal cobrado de forma magistral por el artillero costarricense, quien engañó al arquero rival. El marcador ya anunciaba el 1-0 para Atlas que terminaría siendo definitivo.
De esta forma, Atlas se convirtió en monarca del balompié nacional, además de convertirse en el primer equipo de Jalisco en ganar dicho título.
La primera academia de fútbol
Atlas, como institución, se ha distinguido desde el primer momento por tener una vocación pionera, ya sea en la creación de uniformes cuando nadie más los usaba, o bien, en la práctica de un fútbol técnico cuando se hacía de forma tosca y rudimentaria. Toda esta experiencia y pasión por la disciplina se vio reflejada en 1958 con la fundación de la primera escuela organizada de fútbol en México.
Este plantel, ubicado dentro de las instalaciones del Paradero, además de enseñar los conceptos básicos del fútbol impartía clases de ortografía, gramática, oratoria, entre otras. El sacerdote José Rosario Martínez, quien fue uno de los principales impulsores de esta escuela, dijo sobre los orígenes de este concepto:
“Había muchos jugadores viejos que se ponen la camiseta de Atlas y juegan y son Atlas de corazón; pero no se tenían fuerzas inferiores… ‘¿Y qué sugiere usted?’ me preguntaron. Pues dejar a esos jugadores viejos y formar una pirámide con tres equipos infantiles, tres juveniles de segunda, dos de primera, uno de intermedia, etc. Así nació la escuela”.
Un nuevo hogar
Con el paso de la década de los cincuenta se hacía evidente que el crecimiento de Guadalajara como una ciudad moderna e industrializada había hecho insuficiente el espacio del antiguo Parque Felipe Martínez Sandoval del barrio de Oblatos.
Con el afán de que la ciudad tuviera un recinto digno de un equipo como Atlas y su historia, el directivo rojinegro, Alberto Alvo, presentó en 1954 el proyecto de un estadio apegado a la modernidad que resistiera la prueba del tiempo y pudiera albergar los juegos de cualquier equipo del mundo.
Una tarea de tal magnitud tomó su debido tiempo, dos años después se iniciaron los trabajos en la colonia Independencia y en 1960 se inauguró, glorioso e imponente, el “Monumental” Estadio Jalisco. Fueron los Rojinegros quienes jugaron el primer partido en su cancha ante San Lorenzo de Almagro y fue Alfredo “Pistache” Torres el primer jugador en poner un pie sobre su césped.
Nueva década, los sesenta
Los sesenta serían nuevamente una época de alegrías para la afición rojinegra que fue testigo del enorme nivel futbolístico de una generación comandada por Alfredo “Pistache” Torres, quien para esos días ya era un experimentado delantero acompañando a otros excelsos futbolistas como Guillermo “Campeón” Hernández o al brasileño Ney Blanco, quienes colaboraron en la conquista de dos torneos de Copa.
El primero de mayo de 1962 Atlas ganó su tercera Copa, al derrotar al Tampico con marcador de 1-0 jugando la final en la Ciudad de México y días más tarde otra victoria sobre el Guadalajara daría a los Rojinegros el título de Campeón de Campeones de esa temporada.
En 1967 la cuarta Copa México entraría a las vitrinas de la institución, siendo Veracruz el rival en la final. Los goles de José “Dumbo” Rodríguez y Jesús Delgado fueron los que sellaron la victoria por 2-1.
Fue en esta década que el juego rápido, inteligente y efectivo que desplegaban los jugadores de Atlas les valió dos motes nuevos, el de “Zorros”, que los acompaña hasta la actualidad, y el de “Los niños catedráticos”.
Los amigos del balón
En los setenta Atlas apostó por jóvenes jugadores mexicanos bajo la dirección de Alfredo “Pistache” Torres. De esta generación destacó especialmente Ricardo “Astroboy” Chavarín, quien se convertiría en el goleador de los Zorros durante esta era con sus 62 tantos vistiendo la camiseta rojinegra.
Chavarín, junto con otros como el arquero Héctor Brambila, Bernardino “Berna” García y José Luis “Pillo” Herrera formaron parte del plantel que alcanzó las semifinales de Liga en 1973. Debido a que su estilo de juego era altamente vistoso, con mucha velocidad y verticalidad al ataque, fueron llamados “Los amigos del balón”.
Adiós al Paradero
En los ochenta Atlas pasó por una época de cambios administrativos con el objetivo de darle al equipo instalaciones modernas e inició un ambicioso plan para fortalecer a sus fuerzas básicas. Parte de esta reestructura incluyó la venta de los terrenos del Paradero.
Fue así que en 1985 comenzó a trabajarse en el Centro de Capacitación de Fútbol (CECAF), piedra angular de los resultados tan positivos que tendría este rubro una década más tarde.
En esta época, el primer equipo deleitó a los aficionados con los goles de José de Jesús “Güero” Aceves, quien se convertiría en una leyenda rojinegra al anotar 82 tantos que lo posicionaron entre los goleadores históricos de Atlas. Un jugador infalible en el área rival digno de la estirpe de los Zorros.
Las mejores Fuerzas Básicas de México
La última década del siglo XX significó una verdadera revolución propulsada por el trabajo de las fuerzas básicas, que se consolidaron en esta era como la mejor y más prolífica cantera de México. Para esto fue trascendental la llegada de Marcelo Bielsa en 1992 al frente de las divisiones menores. Jóvenes rojinegros como Jared Borgetti o Pável Pardo debutaron con un hambre insaciable por trascender al mostrar cualidades propias de jugadores de mayor edad y experiencia.
En la segunda mitad de los noventa, la llegada de Ricardo Lavolpe, un entrenador con afinidad por debutar jugadores jóvenes, sería responsable de una generación que rompió todos los pronósticos y expectativas para un equipo basado en fuerzas básicas.
Con una mayoría de jugadores poco experimentados, pero que nunca mostraron complejos ni titubeos, Atlas sorprendió en el Torneo Verano 1999 al convertirse en un equipo ágil y explosivo que al mismo tiempo era ordenado en la defensa. Nombres como Rafael Márquez, Mario Méndez, Daniel Osorno, César Andrade y Juan Pablo Rodríguez eran acompañados por la experiencia de Hugo Norberto Castillo para integrar un equipo fuerte en todas sus líneas, con una química inigualable que permitía espectacularidad durante los noventa minutos de cada juego.
En una de las finales más dramáticas que se recuerden en la historia del fútbol mexicano, Atlas enfrentó a Toluca por el título de Liga. Los Rojinegros lucharon de poder a poder, primero con un vibrante empate a tres en el Estadio Jalisco y luego con otro empate a dos en la capital mexiquense. Todo se definió en la tanda de tiros penales donde Atlas obtuvo el subcampeonato.
El nuevo milenio y la aventura sudamericana
En el 2000, aún dirigidos por Lavolpe, se presenta la oportunidad de disputar por primera vez una Copa Libertadores, el torneo de clubes más importante del continente. Los Rojinegros enfrentaron en la fase de grupos a River Plate, Universidad de Chile y al Atlético Nacional de Colombia. Atlas se clasificó a la siguiente ronda como segundo lugar y avanzó hasta los cuartos de final, donde fue eliminado por Palmeiras de Brasil.
Mientras tanto, la cantera continuó produciendo jugadores del más alto nivel, como Andrés Guardado, quien debutó en 2005 asombrando a los aficionados y al medio futbolístico con su técnica y velocidad; al poco tiempo emigró al fútbol europeo.
En 2008 se vuelve a participar en Copa Libertadores, esta vez contra Boca Juniors de Argentina, Colo Colo de Chile y Maracaibo de Venezuela. En aquella edición los Zorros se mostraron implacables como local, derrotando a sus tres rivales en el Estadio Jalisco con goleadas. Nuevamente se accedió a la ronda de cuartos de final, imponiendo respeto entre las escuadras sudamericanas.
Tras ubicarse como el tercer mejor equipo del Apertura 2014, los Zorros regresaron en el 2015 al certamen continental y se ubicaron dentro del grupo 1, el cual compartieron junto a Atlético Mineiro, Independiente de Santa Fe y Colo-Colo de Chile, sumando seis puntos y llegando hasta la segunda fase del torneo.
Atlas FC es adquirido por Grupo Salinas
A finales de 2013 inició en Atlas una nueva era, con el objetivo de darle la estabilidad que merece, Grupo Salinas asumió la propiedad del equipo para aportar su experiencia en cuanto a la administración de clubes de fútbol.
Inicia la era Orlegi, un futuro brillante, que apunta hacia lo más alto
En mayo de 2019, Grupo Orlegi, grupo empresarial mexicano, con actividades en deporte y entretenimiento, desarrollo inmobiliario, agroindustria y corretaje de seguros; tomó posesión del club como propietario, esto con el compromiso de aplicar las mejores prácticas de la industria y ejercer toda su experiencia en la creación de estructura, infraestructura y procesos, así los Rojinegros empezaron un camino hacia sus objetivos a corto, mediano y largo plazo.
En la actualidad Grupo Orlegi cuenta con 3 equipos profesionales de fútbol: Atlas FC y Club Santos en Liga MX y el Real Sporting de Gijón de la Segunda División Española.
El éxito deportivo de Grupo Orlegi incluye como grupo, el lograr 6 campeonatos de Liga MX, 2 Campeón de Campeones, 1 Copa MX, 1 Liga Expansión; en el beisbol 5 campeonatos de Liga del Pacífico y 2 Series del Caribe, además de organizar importantes eventos atléticos como el Maratón Pacífico Mazatlán, Maratón Corona Querétaro y el Triatlón Pacífico Mazatlán.
Grupo Orlegi adquirió a Atlas FC, convencido de poder transformar un equipo rico en afición, historia y tradición, que se encuentra en una ubicación verdaderamente relevante para el país, como lo es el estado de Jalisco y sobre todo la Zona Metropolitana de Guadalajara y sus vecinos municipios.
Academia, nuevo Centro de Alto Rendimiento de Los Zorros
Dentro de las celebraciones por los 15 años del Modelo Orlegi Sports, el cual se originó a finales de 2006, cuando Alejandro Irarragorri junto a su equipo de trabajo, tomaron la Vicepresidencia Deportiva de Grupo Modelo, institución autónoma que se encargó de reestructurar a Club Santos, arrancando en ese momento Grupo Orlegi, en octubre de 2021 fue presentado el que será el nuevo hogar de los Zorros: Academia.
Continuando con el modelo de gestión de Grupo Orlegi, el cual se basa en la generación de Estructura, Infraestructura y Procesos, se anunció que Atlas FC contará con nuevas instalaciones, logrando con ello transformar la historia de Atlas FC y el fútbol en Jalisco.
Dicho complejo concentrará todas las áreas del club para una mejor operación, más eficiente y al nivel de los requerimientos que la profesionalización del fútbol exige hoy en día.
Este centro de alto rendimiento, ha recibido el nombre de Academia en donde Orlegi invertirá más de USD 15 millones en el proyecto, generando empleos directos e indirectos para los habitantes de Jalisco. Se construirá en el municipio de Zapopán, cerca de Nextipac, por la carretera La Venta – Nextipac.
El complejo será diseñado por el prestigioso grupo arquitectónico Sordo Madaleno Arquitectos, quienes han diseñado importantes obras en la Zona Metropolitana de Guadalajara y todo Jalisco.
Academia será construida por la reconocida empresa jalisciense Anteus y contará con 7 Hectáreas en donde encontraremos 4 canchas naturales y 2 de pasto sintético, instalaciones de ciencias aplicadas al deporte, oficinas deportivas y administrativas.
Contará con Casa Club, para más de 50 residentes con instalaciones de primer nivel, necesarias para el desarrollo integral del talento de jóvenes jugadoras y jugadores.
Con el desarrollo de Academia, se concentrarán todos los equipos profesionales, no profesionales, femeniles y varoniles de Atlas FC, además de la administración del club.
Se planea que el desarrollo pueda estar listo en el 2022.
Junto2, transformamos
Luego de 18 meses de arduo trabajo y análisis por parte de Orlegi Sports, el club entró en un profundo y necesario proceso de restructura, que comenzó con la designación de José Riestra López como Presidente Ejecutivo de Atlas FC al finalizar el torneo Guard1anes 2020.
Riestra respaldó el proyecto deportivo comandado por Diego Cocca para el semestre posterior, además de complementar su decisión con refuerzos importantes en el plantel como el capitán Aldo Rocha, Julio César Furch, Luis Reyes, entre otros. Para el Guard1anes 2021, los Zorros hicieron una campaña importante al obtener el pase a la fase final de Liga MX después de cuatro años. La Furia superó a Tigres el repechaje y, a pesar de ser protagonista en los Cuartos de Final ante Puebla, quedó fuera por posición en la tabla al empatar a un tanto en el global.
El estilo de juego implementado por el equipo de Cocca, caracterizado por su propuesta en ofensiva y solidez en defensa, dejó buenas sensaciones en la afición y permitió el crecimiento de canteranos como Diego Barbosa, Jeremy Márquez, Edgar Zaldívar y Jairo Torres, además de la consolidación de Camilo Vargas, Martín Nervo, Jesús Angulo, y los refuerzos antes mencionados como líderes del equipo.
De cara al Grita México A21, La Academia mantuvo la filosofía que funcionó en el semestre anterior, redondeando su once inicial con la incorporación del colombiano Julián Quiñones para acompañar a Furch en el frente de ataque. Bajo la convicción de ir partido a partido, el cuadro tapatío cosechó puntos importantes que le permitieron escalar peldaños en la tabla general, hasta alcanzar el segundo puesto con 29 unidades.
Al calificar de manera directa a los Cuartos de Final, el Repechaje arrojó a Rayados como sinodal en la primera instancia de la Fiesta Grande. La llave fue para los Rojinegros, que dominaron ambos cotejos y se clasificaron a las Semifinales para enfrentar a Pumas. Tanto en el Olímpico Universitario como en el Jalisco el trámite perteneció a La Furia, lo que aseguró su pase a la Gran Final ante la euforia de La Fiel, que vería a su equipo pelear por el título 22 años después.
Atlas FC y León se disputaron la corona del Grita México A21, con el Nou Camp como sede de la ida. La hostil atmósfera en el Bajío no impidió que los Zorros se adelantaran en la pizarra con un remate diestro de Luis Reyes; los Esmeraldas empataron momentos más tarde. “El Emperador” Furch volvió a poner en ventaja a los tapatíos, pero dos jugadas aisladas permitieron a los de Guanajuato dar la vuelta al tanteador.
La Academia regresó al Monumental Estadio Jalisco con el objetivo de revertir la situación. El Coloso de la Calzada Independencia fue un hervidero la noche del 12 de diciembre: dos horas antes del pitazo inicial ya no cabía un alma más. La Fiel alentó a los suyos y apretó a los Panzas Verdes en cada instante, mientras el equipo de Cocca hacía lo propio en la cancha.
Cumplidos 55 minutos de juego, Jeremy Márquez remató un rechace derivado de un tiro de esquina a favor; su contacto fue machucado, pero permitió que Aldo Rocha, en posición correcta, peinara el balón hacia el fondo de la red para hacer explotar el Jalisco e igualar el marcador global. A pesar de la insistencia atlista, se cumplió el tiempo regular y los periodos extra, dejando así que los penales decidieran al campeón.
Camilo Vargas se volvió figura en el arco sur del Monumental. El colombiano se lanzó bajo, a la izquierda, para detener el segundo lanzamiento de León, y repitió la hazaña en el quinto, abriendo la puerta de la gloria al último tiro de la noche, en los pies de Julio César. “El Emperador” clavó la mirada en la portería, cruzó fuerte, raso y colocado ante la estirada inútil del arquero, para decretar el segundo título de Liga MX para La Academia del Fútbol Mexicano.
Así, Atlas FC transformó su historia para conquistar su décimo título de la era profesional, sumando 4 Copa MX, 4 Campeón de Campeones y después de dos años de Orlegi Sports al frente de la institución Rojinegra, se consiguió el segundo título del máximo circuito del balompié mexicano y vamos por muchos más.
Cr3amos, un nuevo presente
El éxtasis Rojinegro no cesó después de hacer a un costado 70 años sin título de Liga. Diego Cocca y sus pupilos encararon el Clausura 2022 con la misma hambre del semestre anterior desde el primer día, mentalizados en repetir la hazaña por segundo certamen en fila.
Enero arrancó en casa para los Zorros, que fueron recibidos con el pasillo de honor a cargo de su rival, Atlético de San Luis, y engalanados por los cánticos de ¡DALE CAMPEÓN! por parte de La Fiel Rojinegra. A pesar de la sensible baja de Jesús Angulo en la zaga, el profesor encontró un refuerzo a la altura en Emanuel Aguilera.
La Furia ligó seis partidos sin conocer la derrota, desplegando siempre el eficiente estilo que tan positivos resultados dio el torneo anterior. Sin embargo, entrado en ritmo el certamen, la suma de juegos y el poco tiempo de descanso, derivados en lesiones, mermaron en el desempeño atlista. Esto no fue excusa ni impedimento para menguar en el rendimiento del equipo, pues la gran fortaleza de este grupo está en la unión y su competencia interna.
Jornada a jornada, con Furia, Lucha y Honor, Cocca y sus dirigidos escalaron posiciones en la tabla hasta alcanzar el tercer peldaño, asegurando así nuevamente la clasificación directa a los Cuartos de Final. Finalizada la temporada regular junto a los encuentros de Repechaje, el destino puso la primera prueba en el camino Rojinegro hacia el Bicampeonato: las Chivas.
El recinto zapopano recibió el juego de Ida, dominado de principio a fin por La Academia. Cada parte del plan ideado por el cuerpo técnico atlista abonó a que, antes de finalizar la primera mitad, Atlas FC se pusiera arriba en el tanteador con doblete de Jeremy Márquez. A pesar de que el rival descontó en el complemento, la ventaja fue para La Furia. Mientras tanto, el Monumental Estadio Jalisco se pintó totalmente de rojo y negro en la Vuelta: el Campeón anotó primero una vez más, esta vez por cuenta de Aníbal Chalá, y a pesar de quedarse con un hombre menos en la segunda parte, se impuso por 3-2 en la serie para instalarse en Semifinales.
Tigres fue el siguiente reto, esta vez con la serie comenzando en el Coloso de la Calzada Independencia. Ahí, los Zorros dieron un recital en su cancha ante el deleite de su afición. Julio Furch, Luis Reyes y Julián Quiñones provocaron el rugido del Jalisco para sellar un contundente 3-0 de cara a la visita al Volcán. Meterse a San Nicolás no es cosa fácil; el cuadro tapatío aguantó la presión de la hinchada norteña y agrandó la ventaja con otro tanto de Quiñones antes del descanso. Los Universitarios reaccionaron al lograr empatar el global, pero no contaron con el penal que se señaló sobre el agonizar del encuentro por un empujón sobre Aldo Rocha. Fue el mismo capitán de La Furia quien cobró con decisión y potencia, raso y cruzado, sellando así el 5-4 en el global que permitió al Campeón repetir actuación en una Gran Final por segundo semestre consecutivo.
La última aduana hacia la doble corona fueron los Tuzos de Pachuca, líderes de la fase regular del Clausura 2022. Nuevamente el Jalisco albergó el primer duelo de la llave, en el que se vivió un verdadero choque de calidad entre ambos conjuntos. Luego de un par de oportunidades por bando, una combinación entre Reyes y Javier Abella desenlazó en un seco testarazo del canterano atlista para mover los cartones ante el júbilo de La Fiel. A pesar de que la visita intentó nivelar el asunto, la última palabra la tuvo Julián, quien en una jugada a base de riñones y determinación, dejó atrás a tres elementos hidalguenses antes de definir de zurda y poner el 2-0 en el ocaso del juego.
Todo se definió en el Estadio Hidalgo, la noche del domingo 29 de mayo. La Furia fue recibida por un intenso cuadro albiazul, pero también con un numeroso grupo de Rojinegros que viajaron hasta Pachuca para alentar al equipo. Los locales marcaron temprano en el encuentro, aunque esto no mermó en el planteamiento tapatío. De a poco se niveló el trámite hasta que el silbante pitó penal, con asistencia del VAR, a favor del Campeón por una mano dentro del área. El Emperador Furch se plantó en el manchón, como seis meses atrás, y cambió su ejecución por el tanto del empate momentáneo. Previo a finalizar la primera parte, nuevamente Pachuca descontó en el global, abriendo la puerta a una emocionante segunda parte.
La Academia encaró el complemento con la madurez y serenidad que la transformación le brindó. Nulificó a los locales, menguó sus intentos por encontrar el gol que mandaba el partido a la prórroga y, a pesar de quedarse de nuevo con uno menos en el campo, llevó el partido a buen puerto hasta el silbatazo final.
169 días después, Atlas FC refrendó su corona para así convertirse en el tercer Bicampeón en la historia de los torneos cortos dentro del balompié nacional. Además, al proclamarse monarca del Apertura y Clausura de la temporada 2021-2022, se alzó Campeón de Campeones del año futbolístico. En poco más de 5 meses, las vitrinas Rojinegras pasaron de contar con 9 títulos oficiales, a lucir 12: 3 títulos de Liga, 4 de Copa y 5 Campeón de Campeones.
Este nuevo presente no ha hecho más que comenzar. Atlas FC y Orlegi Sports seguirán trabajando de la mano para que la Transformación traiga más resultados positivos para el club y su Fiel afición.